LaSexta: Pocos anunciantes para muchos minutos

Y al tercer día, una media de 20 minutos de anuncios por hora. Ni TVE, oiga. Asombroso fue el caso de Los Soprano ayer. Que conste que iba ya mentalizado, ya que me contaron el agobiante trato de Surface, pero lo máximo que aguantaron (e hice la comprobación contando el tiempo) fueron 20 minutos seguidos de emision. A cada poco hacían cortes publicitarios de una duración media de 10 minutos, y no está mal si tenemos en cuenta que LaSexta solo lleva... 3 días de emisión 24 horas. Wow.

Necesitamos un canal como HBO en España
pero a grito de "ya"

Y esto no solo pasa con el prime time: en cada serie americana, hasta en los infumables "Supervillanos" (de eso irá mi post de mañana) meten los dichosos cortes de publicidad y esto es una pasada teniendo en cuenta que la cadena tiene unas previsiones de un 0% de share a partir del lunes, que es cuando Sofres comenzará las mediciones de esa cadena. Quizás también sea comprensible que metan tantos comerciales debido a que, si esperas que no te vea ni el Tato, al menos intentes librarte de los números rojos metiendo publicidad a saco. Pero realmente es algo temeroso y que recuerda a épocas como TVE1 a mitades de los 90. Y muchos nos tememos que en las series Anime, de 20 minutos de duración, metan 1 bloque de 10 minutos. Y que en el Mundial hagan como la Rai Uno, que en partidos de la selección mete un anuncio en vez de repetir la jugada importante.

Lo más gracioso es que tampoco parece que una empresa tenga mucho interés en anunciarse allí: en cada corte suele aparecer un anuncio de: Toyota, Línea Directa, Boulanger, BoQ o de Telefónica entre otros muchos. E incluso repiten los anuncios, como aquella vez que veía Óliver y Benji en A3 (recuerdos de mi infancia) y metieron "Los Puentes de Madison en VHS" 6 veces. Asi que si alguien esperaba ver pocos anuncios, como cuando Cuatro comenzó (y aún lo hacen; es la que menos duración de publi tiene) ya se puede ir olvidando. LaSexta ahora mismo no hay quien la vea sin que se desespere. Mal ejemplo para darse a conocer, sin duda.